
- Encuentra tiempo para el autocuidado: Dedica tiempo regularmente para actividades que te ayuden a relajarte y recargar energías, ya sea practicando ejercicio, meditación, pasatiempos creativos o simplemente descansando.
- Busca apoyo: No tengas miedo de pedir ayuda cuando la necesites. Ya sea hablar con un colega de confianza, un amigo o un profesional de la salud mental, contar con un sistema de apoyo puede ser fundamental para mantener tu bienestar emocional.
- Practica la gratitud: Trata de enfocarte en las cosas positivas y en las razones por las que te dedicaste a este campo. Practicar la gratitud puede ayudarte a mantener una actitud positiva incluso en momentos difíciles.
- Establece rutinas saludables: Mantén una rutina regular de sueño, alimentación y ejercicio físico. Estos hábitos básicos pueden tener un impacto significativo en tu bienestar general y en tu capacidad para manejar el estrés.
- Cuida tus relaciones personales: Dedica tiempo de calidad a tus relaciones personales, ya sean familiares, amigos o seres queridos. Estas conexiones pueden brindarte un importante apoyo emocional y ayudarte a mantener una perspectiva equilibrada.
- Encuentra significado en tu trabajo: Reconoce el impacto positivo que estás teniendo en el mundo a través de tu trabajo en una ONG. Recordar el propósito y la importancia de tu labor puede ayudarte a superar los momentos difíciles y mantener tu motivación.